Ruta

DIA 13

Salimos con ganas de ruta en los patrols después de comer ya que nos esperaba un largo viaje por carretera. Tras unas cuantas horas en coche llegamos a nuestro destino, Proaza. Al llegar buscamos un sitio para dormir y la amable gente del pueblo nos dejó dormir en el polideportivo, como estabamos muy cansados del viaje en coche cenamos, dimos un pequeño paseo y a dormir.



DIA 14

Nos levantamos temprano y desayunamos fuerte para coger fuerzas y preparar bien la ruta en bici. Fuimos donde alquilaban las bicis y nos preparamos para salir con muchas ganas y cada uno con su bici. Hicimos una ruta bonita y un poco dura, pero mereció la pena por el bocata que nos esperaba al llegar al pueblo.
Después de comer salimos de nuevo con las bicis y las fuerzas repuestas, así que se nos hizo fácil la vuelta. Al dejar las bicis volvimos a montar en los patrols y nos dirigimos rumbo a Arriondas. Al llegar nos costó un poco más buscar un sitio para dormir, pero conseguimos que una señora nos dejara dormir en el jardín de su casa, cenamos y nos fuimos a dormir.

DIA 15

Salimos temprano de donde dormimos, y nos dirigimos a la playa de Santa Marina. Nos pasamos todo el día en la playa hasta que se nos hizo tarde y nos fuimos a dormir a Arriondas de nuevo, pero esta vez en la iglesia del pueblo. Antes de ir a dormir nos dimos una vuelta por una feria medieval que se hacía en el propio pueblo y nos fuimos a dormir.

DIA 16

Nos levantamos temprano y desayunamos, fuimos donde alquilaban las canoas y allí nos explicaron la ruta del descenso del Sella y las medidas de seguridad. Nos pusimos por parejas y empezamos nuestro camino, tras un rato de remar hicimos unas cuantas paradas para descansar y comer. Tras 15 kilométros llegamos al final de la ruta, nos duchamos y nos fuimos con los patrols a Poncebos, allí preparamos un dobletecho para dormir y la cena.

DIA 17

Nos levantamos en puente Poncebos y desayunamos dispuestos a hacer con fuerza la ruta del Cares. Temprano, empezamos a andar, una ruta sencilla y muy bonita. Comimos en Caín tranquilamente y una vez comidos hicimos la ruta al contrario de Caín hacia Poncebos donde cogimos los patrols y nos dirigimos hacia el campamento, ya había acabado la ruta.



Fue una ruta sorprendente donde se mezclaban bicis, barcas y una caminata que acabó pareciendonos a todos una gran ruta.